Esto es lo único que puedo decir después de un mes de exposición en este maravilloso pueblo.
Durante todo el tiempo que he estado en Luarca he recibido un montón de cariño, tanto del personal del Ayuntamiento, como de la Oficina de Turismo, del Casino, de los Medios y de los propios vecinos, que han estado pendientes de si necesitaba cualquier cosa. Me ha sorprendido la cercanía y generosidad de todos ellos y por eso empiezo este resumen agradeciéndoles que me hayan acogido de este modo a mí y a mis obras.
A través de mis cuentas en Instagram y Facebook he ido compartiendo momentos especiales que han surgido en estas semanas. También doy la bienvenida a todos los que después de visitar la exposición, e incluso allí mismo, han comenzado a seguirme y a compartir mis publicaciones. Desde luego, las redes sociales son un medio perfecto para estar al corriente de mis nuevos proyectos y para compartir buenas noticias.
Agradezco también las palabras de ánimo y reflexiones de los visitantes en mi libro de firmas, las de niños y mayores, que después de disfrutar de mis trabajos han querido compartir conmigo sus impresiones. Charlas distendidas y profundas sobre lo que el arte es capaz de transmitir y cómo cada artista tiene su manera de hacerlo. Llegar a conectar con el público y verles contemplar las obras me emociona, ya que en cada una de las obras expuestas hay un pedacito de mí... Gracias a quienes han querido tener una de ellas, para disfrutarlas mucho, mucho tiempo.
Ha sido una presentación de mi trayectoria profesional en Luarca, con dibujos recientes acompañados de obras antiguas que se mantienen actuales como el primer día. A la Sala "Álvaro Delgado" no es fácil acceder, aún así el "boca a boca" ha sido increíble y ha provocado que también se conozca mejor un espacio amplio y luminoso donde luce todo lo que que ponga, un espacio circular que ofrece intimidad mientras se contemplan las obras. Música tranquila y flores en mi mesa... quien visita mi exposición merece una buena acogida por el tiempo que me dedica.
Ya he vuelto al estudio, aún queda trabajo para ordenar y colocar todo en su sitio hasta la próxima escapada expositiva. En Luarca han sido muchos los que me han tendido la mano para ayudarme a exponer en otras ciudades españolas y también fuera de nuestras fronteras, eso es algo realmente emocionante para mí. Nuevos proyectos que se suman a los que tengo entre manos, todos para seguir creciendo como artista y como persona, conectando mi arte con quien se acerca a verlo.
Comunicar emociones a través de mis obras y ver que son capaces de emocionar es lo que da sentido a mi vocación, a lo que soy y a lo que no podré nunca renunciar.
¡Gracias, Luarca, por animarme a seguir creando!